Mostrando entradas con la etiqueta Artículos técnicos. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Artículos técnicos. Mostrar todas las entradas

martes, 15 de mayo de 2012

Acerca de las malas rachas (parte 3 de 3)

Hola a todos. Hoy vengo a traerles la tercera y última parte de este artículo, relacionado con las malas rachas. En la primera parte, hemos descripto una mala racha, y definido qué características resulta erróneo atribuirles. Para aquellos que no la hayan visto, pueden leerla aquí: Acerca de las Malas Rachas - Parte 1

En la segunda parte del artículo (Acerca de las Malas Rachas - Parte 2), hemos tratado cuales son las reacciones erróneas típicas, que deben ser evitadas.

En esta tercera parte, vamos a analizar qué cosas debemos hacer ante una mala racha, y cómo debemos afrontarlas.

¿Cómo debemos responder ante una mala racha?

Aunque esta claro que el póker en el que existe una influencia del azar, y que si el mismo de alguna forma nos está perjudicando o está beneficiando a nuestros rivales, existen ciertas cosas que podemos hacer para evitar agravar este efecto negativo, y para que su impacto sea para nosotros el mínimo posible.

Las malas rachas se asumen de la misma manera que se asume todo lo demás en el póker. Tiene que tomar las decisiones que le permitan ganar la mayor cantidad de dinero posible a largo plazo” (The poker Mindset)

Esto significa intentar tomar las mejores decisiones dentro de las mesas (mientras estamos jugando), y fuera de las mismas (ya sea en la elección de las mesas, el tipo de juego, el trabajo analítico posterior, las condiciones en que nos preparamos a jugar, etc.).

Si permitimos que la mala racha nos haga caer en alguno de los errores mencionados en la segunda parte de este artículo, es posible que la misma se agrave, produciendo un estado de depresión y mayor pérdida de confianza, del cual será cada vez más difícil salir, hasta que seamos beneficiados en forma notoria por la suerte. Es decir, perdemos, nos genera depresión y pérdida de confianza, tomamos malas decisiones, perdemos más, y así entrando en un ciclo del cual no resulta fácil escaparse sin ayuda de la suerte.

Para evitar que esto ocurra, debemos evitar las“malas decisiones”, cortando de esta forma con el ciclo mencionado. Si tomamos las mejores decisiones, la mala racha finalizará en algún momento, y habremos hecho lo correcto para minimizar las pérdidas, lo cual es lo mismo que decir incrementar las ganancias a largo plazo.

El capital de juego (Bankroll)

La primera consideración que debemos realizar cuando nos encontramos frente a una mala racha es evaluar si nuestro capital de juego corre peligro.

El Bankroll es una herramienta básica y sumamente importante para el jugador de póker, y la pérdida del mismo podría producir el fin de su carrera.

En mi caso, soy partidario de extremar las medidas destinadas al cuidado del Bankroll. Todas las medidas parecen exageradas cuando estamos ganando y en una buena racha, pero al encontrarnos con un período de pérdidas, estas medidas parecerán justificadas.

He leído muchas recomendaciones de jugar con 30 cajas para un juego de Holdem sin límite (cash games). Esta medida puede parecer exagerada si estamos acostumbrados a ganar, pero es muy posible que no resulte del todo suficiente cuando nos encontremos frente a una mala racha. Hay que tener en cuenta que muchas de estas recomendaciones se hicieron en un período del póker en que existía mucha menos agresión, y quizás el impacto de una sesión negativa era menor de lo que puede llegar a ser en la actualidad.

En una conferencia de Nanonoko a la que asistí en Bahamas, le preguntaron al respecto, y contestó que cuando un jugador hace un All In, el resultado de esa mano no debería cambiar absolutamente nada en la vida de ese jugador, por lo que él recomendaba un mínimo de 100 cajas para cash games.

Cada uno debe estudiar y evaluar cuanto es lo que considera que debe tener para afrontar un cierto nivel de juego o un cierto valor de entradas a torneos, y luego respetar sin hacerse trampas las reglas que haya definido para el manejo del capital de juego. No detallaré aquí como debe hacerse, ya que depende de muchos factores, como ser modalidad de juego (cash / torneos multi-mesa / torneos sit & go), tipo de mesas (cantidad de jugadores), tamaño de las apuestas, tipo de póker (Holdem con límite, sin límite, Omaha, etc.), cantidad de mesas que se juegan simultáneamente, como así también de la forma y estilo propias de cada jugador, y del nivel de riesgo de las decisiones que suele tomar

Por todo lo expuesto algo muy importante que debemos evaluar frente a una mala racha es si según las reglas que tengamos definidas para el manejo de nuestro Bankroll, podemos seguir o no jugando el nivel de mesas o torneos que nos encontrábamos jugando. Y de no ser así, no debería haber ninguna duda, y deberíamos bajar de nivel y jugar por menos dinero.

Este tipo de decisiones pueden resultar difícil, ya que suelen ser consideradas como un “retroceso”, además de que si comenzamos a ganar obviamente será más difícil recuperar lo perdido. A pesar de esto, debemos aceptar la realidad, y entender que si no tenemos el dinero suficiente para jugar donde nos encontrábamos jugando, debemos dar ese paso hacia atrás que nos permita afianzarnos, para luego si queremos poder dar el paso nuevamente hacia adelante (aunque esto último no deba ser considerado como algo obligado).

Afrontando la mala racha

En primer lugar, debemos mantener la calma. Aprender a no dejarnos llevar por el pánico nos permitirá afrontar una mala racha. De no ser así, posiblemente estaríamos agravando los resultados, profundizando la misma.

Debemos tomar las decisiones con la mente despejada, de forma de poder abordar el problema en forma objetiva. Si no nos encontramos en estado de calma, no sólo no deberíamos jugar, sino que no deberíamos tomar ninguna decisión relacionada con nuestro juego. Es importante que todas las decisiones que tomemos provengan de un análisis lógico, y no de de un cierto estado emocional en que nos encontremos.

Aunque la mala suerte exista, pensemos siempre que estamos jugando un juego a largo plazo. La mala suerte no durará siempre, y podremos superarla. Debemos estar convencidos de que no seremos uno de esos jugadores que se quejan todo el tiempo de la mala suerte. Estos jugadores generalmente están condenados al fracaso.

Evitar pensar en el dinero perdido, y en el valor que tiene fuera del mundo del póker. Hacerlo, podría generar que intentemos recuperarlo más rápido de lo posible, lo cual podría agravar las pérdidas. Si pensamos en tomar las decisiones correctas a largo plazo en vez de ganar dinero, éste último será una consecuencia de nuestros actos.

El póker es un juego con varianza elevada, y debemos aceptar que lo que nos está sucediendo es inevitable. Es algo que no podemos manejar, y lo mejor que podemos hacer es afrontarlo de la mejor forma que podamos.

Por último, algo muy importante para poder salir de una mala racha, es concentrarnos lo más posible en mejorar nuestra forma de jugar, y en evitar el desquiciamiento (tilt).

El desquiciamiento (tilt)

Desquiciarse es jugar peor de lo que uno suele jugar. Puede haber muchos factores que produzcan este efecto, y uno puede ser una consecuencia de no haber podido mantener la calma frente a una mala racha. Puede manifestarse haciendo que uno deje la cautela de lado, o que juegue cada vez de forma más agresiva y arriesgada para recuperar, o en forma demasiado conservadora intentando perder lo menos posible. O quizás jugará durante demasiado tiempo para recuperar, haciéndolo estando cansado o aburrido.

Siempre que detectemos que nos encontramos en una de estas situaciones, será lo mejor dejar de jugar, y entender que siempre habrá otro día para recuperar.

El ciclo de mejora continua.

Este tipo de trabajos debería realizarse no sólo en los períodos en donde nos encontramos perdiendo, sino en forma permanente en la carrera de un jugador de póker. Dedicarse a un ciclo continuo de análisis y mejora durante los períodos de ganancias, hará que se reduzca la duración de una mala racha. Aprender a jugar mejor hará que el efecto producido en forma negativa por el azar se vea reducido.

Si reducimos el “mal juego”, mejoraremos nuestra tasa de ganancias. Si esto ocurre, el impacto de la mala racha en el largo plazo será cada vez menor.
  • Mejore su forma de jugar cuando las cosas salen bien
  • Mejore su forma de jugar cuando se encuentra en una mala racha.



Recomendaciones Personales

Para cerrar, les dejo algunos puntos a modo de resumen:
  • Cuidemos el Bankroll. Si hemos perdido la calma, lo mejor siempre será bajar de nivel, o tomarnos un cierto descanso.
  • Nunca subir de nivel durante una mala racha. Sólo se debe hacer en forma programada, y como consecuencia de un período de ganancias.
  • No tomar decisiones abruptas que cambien nuestro juego, que no provengan de un análisis profundo del mismo.
  • No apurarse por recuperar el dinero. El póker es un juego a largo plazo, y la paciencia y disciplina son atributos que todo jugador debe tener.
  • No jugar nunca cuando detectamos que estamos “on tilt”. Siempre quedará otro día para recuperar, no tengamos demasiada ansiedad por hacerlo.
  • Busquemos siempre jugar en situaciones óptimas.
  • No pensemos la mala racha como una derrota personal, o como un deshonor. Es algo que no podemos evitar, y debemos afrontarla de la mejor manera posible.
  • Trabajar en el proceso de mejora contínua de nuestro juego, asegurará los resultados a largo plazo.


Espero les haya gustado. Les dejo un saludo.-

jueves, 3 de mayo de 2012

Acerca de las Malas Rachas (parte 2 de 3)

En esta ocasión, vengo para escribirles la segunda parte del artículo acerca de las malas rachas. En la primera parte hablamos de lo que es una mala racha, y de qué características no debemos atribuirles. Para aquellos que no lo hayan visto, aquí les dejo un enlace: Acerca de las Malas Rachas-Parte 1

Tal como definimos anteriormente, una mala racha es un período de tiempo en que los resultados son peores de los esperados. Ahora debemos plantearnos, cómo debemos y cómo no debemos reaccionar ante una mala racha. En esta parte del artículo, analizaremos qué cosas no debemos hacer, dejando la forma en que debemos reaccionar para la tercera parte.


Qué no hacer frente a una mala racha

En primer lugar, haciendo referencia a algo ya mencionado anteriormente, tengamos en cuenta que si una mala racha se prolonga mucho más de lo esperado, es posible que estemos tomando malas decisiones, que hagan que la misma se agrave o profundice. Probablemente lo que haya comenzado como “mala suerte”, termine siendo una mezcla de azar con “malas decisiones”, lo cual produciría un resultado bastante más drástico que la consecuencia directa de la mala suerte inicial.

Analizaremos entonces, qué es lo que no debemos hacer cuando nos enfrentemos a este tipo de situaciones, para evitar profundizar los efectos de la mala racha. Muchas de las conductas mencionadas a continuación son errores frecuentes, y evitarlos requiere cierta disciplina, lo cual considero que es una de las más importantes condiciones para ser un jugador de póquer exitoso.

Pérdida de confianza

Algo ya mencionado anteriormente, es que el póquer es un juego donde existe una tendencia general a que cuando uno se encuentra en una mala racha, sienta que nunca será un jugador ganador, y por el contrario, cuando la suerte se encuentre de nuestro lado, ganar a una cierta tasa de ganancias nos parecerá la cosa más natural del mundo, y que todo está sucediendo tal como debe suceder.

Uno de los problemas que puede generarnos una mala racha, es una pérdida de confianza en nuestro juego. Aunque se trate de un problema psicológico, el cual puede no ser fácil de superar, es importante al menos conocerlo para poder entender qué nos está sucediendo.

El problema fundamental de la pérdida de confianza, será que si analizamos las situaciones con miedo, o faltos de seguridad, no tendremos la objetividad suficiente para tomar las decisiones correctas. Tener miedo de perder, o esperar perder, puede producir exactamente ese resultado.

En algunos casos optaremos por intentar minimizar las pérdidas en lugar de tomar una decisión arriesgada pero probabilísticamente correcta, podremos pensar que ciertas cartas no las estamos jugando bien y simplemente dejar de jugarlas. Jugaremos los proyectos en forma pasiva por miedo a que no se completen. Al no recibir ningún juego en el Flop no intentaremos hacer apuestas de continuación por miedo a perder más, y simplemente abandonaremos la mano. Todo esto, por mencionar algunos ejemplos de los efectos que podría producirnos la falta de confianza en nuestro juego.

Si esto nos está sucediendo, probablemente sea mejor tomarnos un descanso, y analizar qué nos está pasando, en vez de seguir jugando.

Intentar recuperar rápidamente las pérdidas.

Una de las consecuencias directas de una mala racha, es la pérdida de dinero (dinero no ganado, o perdido). Esto puede ocasionar una especial sensibilidad al valor del mismo, lo cual nos puede generar una gran ansiedad por recuperarlo.

Un error típico es comparar el dinero perdido con lo que se podría haber adquirido con él. Esto no significa que deba ignorarse su valor monetario, sino que dentro del póquer el mismo es relativo, y al formar parte del capital de juego debe ser considerado como una herramienta para ganar más dinero, y no como disponibilidad monetaria.

Esta pérdida de dinero, puede ocasionar la disminución del capital de juego (bankroll), lo que podría significar que ya no tenemos el presupuesto suficiente para jugar los niveles que estábamos jugando, además de poder ser visto como un retroceso en la carrera del jugador de póquer, provocándole un efecto desmoralizador.

En estas circunstancias es importante pensar siempre donde estamos, y no donde nos encontrábamos anteriormente. No pensar demasiado en lo que se ha perdido, e intentar tomar las mejores decisiones considerando que tenemos la posibilidad de un nuevo comienzo.

En cuanto a las conductas erróneas típicas, incluiremos a cualquiera que demuestre demasiada ansiedad por recobrar lo que se ha perdido. Se debe entender que el póquer es un juego a largo plazo, e intentar acelerar la recuperación es posible que no produzca otro efecto que profundizar las pérdidas.

Cuando hablamos de este tipo de actitudes, nos referimos puntualmente a:

  • Jugar niveles superiores a los que estamos acostumbrados: Probablemente sea el peor error que se pueda cometer en este tipo de situaciones. No sólo estamos corriendo un riesgo excesivo para la circunstancia que estamos pasando, sino que además si se toma este tipo de decisiones probablemente no nos encontremos con el 100 % de nuestra capacidad de juego (y posiblemente con una pérdida significativa de confianza). Además, quizás nos encontremos con un nivel de juego mayor por parte de nuestros rivales. Todo esto hace que una subida de este tipo pueda ser terrible, pudiendo ocasionar la pérdida total del capital de juego.
  • Jugar una cantidad excesiva de manos: Dado que el póquer es un juego en el que los jugadores exitosos suelen realizar movimientos “probabilísticamente correctos”, y que las probabilidades se cumplirán en el largo plazo, existen jugadores que basados en estos elementos recomiendan que para pasar una mala racha, se debe jugar una mayor cantidad de manos, incrementando de esta forma la posibilidad de cumplimiento de los porcentajes esperados (basándose en el supuesto de que las apuestas fueron realizadas en forma correcta). Es decir: “si las probabilidades están de mi lado, juego mucho más, y los resultados deberían nivelarse”. Si bien esto es algo con cierta lógica, también es cierto que existen otro tipo de elementos que afectan a los resultados, como ser los factores psicológicos, y el cansancio. Si uno intenta jugar una mayor cantidad de manos para recuperar, es posible que terminemos jugando enojados (con una agresión desmedida), o faltos de confianza, o cansados mentalmente, provocando de esta forma una merma en el rendimiento y calidad de juego, lo cual podría llegar a afectar a los resultados. Aunque sea una utopía, uno debería buscar jugar siempre en las situaciones donde no existen estos factores, ni ningún otro que pueda provocar una baja en el rendimiento. Es decir, jugar siempre en situación óptima.
  • Realizar cambios abruptos en el modo de jugar: Este tipo de cambios, deben generarse desde el estudio y análisis de nuestro juego, pero nunca deben generarse “en caliente” como consecuencia de los resultados a corto plazo. Algunos comportamientos típicos son: jugar mucho más agresivos, foldear mucho menos ante las subidas de los rivales, foldear más por miedo o falta de confianza, cambiar la forma de jugar ciertas manos típicas, ampliar o reducir el rango de manos con el que abrimos, o con el que realizamos un 3Bet, intentar mantener el pozo pequeño cuando no debemos hacerlo, etc.. Es decir, debemos evitar cualquier cambio que no sea meditado y analizado sobre nuestro juego, que se base en resultados cortoplacistas y en observaciones realizadas durante nuestras sesiones, y no como consecuencia de un análisis posterior del mismo.

Como no quiero cansarlos, he dejado para una tercera parte del artículo las cosas sí considero que se deben hacer frente a una mala racha. Todo esto basado en mi experiencia personal, en la experiencia de otros jugadores cercanos a mí, y en la bibliografía consultada.

Espero les haya gustado. Quedo a la espera de sus comentarios.

Un saludo.-

miércoles, 25 de abril de 2012

Acerca de las malas rachas (parte 1)

Hola a todos. Dado que últimamente he recibido muchas consultas de otros jugadores (correos, mensajes en Facebook, mensajes en el blog), relacionadas con las malas rachas (y con cómo afrontarlas), he decidido escribir algo al respecto, ya que creo que es un tema interesante que todo jugador de póker debe aprender a manejar.

Existe ya mucha bibliografía al respecto, y algo que recomiendo mucho es el libro “La mentalidad del jugador de póker”, que trata este y otros temas relacionados con la psicología en el póker. La idea de este artículo es dar lo que para mí es un panorama completo de este tema, y mi opinión en cada uno de los casos. He dividido el contenido en dos partes, dado que es un tema sobre el que hay bastante para decir, y no quiero aburrirlos demasiado con un escrito demasiado extenso.

¿Qué es una mala racha?

Aunque desde el punto de vista teórico / matemático una mala racha no existe, podemos considerar que una mala racha es un período de tiempo (o una serie de sesiones), en donde los resultados son peores de los esperados.

Esto puede afectar a jugadores perdedores, “Break Oven” (jugadores que no ganan ni pierden), o jugadores ganadores. Obviamente la forma en que afectará será distinta en cada caso, ya que para un jugador perdedor, quizás se trate de un período de tiempo en que pierda más de lo acostumbrado, para el jugador “Break Even” se puede tratar de un período de tiempo en el que registra pérdidas, y para el jugador ganador podrá tratarse de un período en el que gana menos de lo esperado, simplemente “no gana”, o incluso pierde.



Dado que el póquer es un juego de elevada varianza (en algunas variantes mayor y en otras menor), resulta inevitable que todo jugador de póquer tendrá que pasar algunas malas rachas en su carrera. Y esta quizás sea psicológicamente una de las cosas más difíciles que deba afrontar.

Usualmente, cuando nos encontramos jugando una sesión de póquer, el resultado depende en su mayoría de unas pocas manos. Muchas veces luego de jugar una sesión, si terminamos una caja arriba (por ejemplo ganando $ 100.- en NL100), consideramos que la sesión ha sido positiva. De hecho si esa sesión fue por ejemplo de 2000 manos, estaríamos ante una tasa de ganancia de 5 bb/100 manos, lo cual es resultado excelente si se mantiene a largo plazo. Pero si en esas 2000 manos terminamos All In menos del 1 % de ellas (es algo bastante normal en Full Ring), el resultado de la sesión estará dependiendo casi exclusivamente del resultado de esas 20 manos (ya sea All In en el River o antes).

Llevando el ejemplo anterior a un mayor detalle, si de las 20 manos que terminamos All In ganamos 11, el resultado de esas 20 manos en un entorno donde siempre hablemos de estar jugando con un stack efectivo de $ 100.- (y sin comisión), será de: +(11 x $100) – (9 x $100.-) = $ 200.-. Es decir que una mínima diferencia en una cantidad porcentual muy pequeña de manos, podrá ser determinante para el resultado de la sesión.

Y esto es hablando de póquer on-line, ya que en vivo, donde en una mesa de 9 jugadores se pueden jugar un promedio máximo de 30/35 manos por hora, quizás en un día terminemos jugando 1 o 2 manos donde terminemos All In, y el resultado de esas manos nos determinará el resultado del día.

Si trasladamos nuestro análisis a una serie de sesiones, el resultado estará a su vez producido por el resultado individual de cada sesión, el cual a su vez dependerá de unas pocas manos.

Todo esto hace que el póquer pueda ser visto en ciertas situaciones como un juego bastante injusto, en el que cuando tenemos resultados muy positivos existe una tendencia a sentirse invencible, y cuando son negativos a pensar que uno nunca va a poder ganar en este juego. Claramente no es ni una cosa ni la otra, sino que podemos haber sido beneficiados o perjudicados por una variable aleatoria (el azar).

Resumiendo, aunque consideremos que una mala racha es un período de tiempo en el que observamos que tenemos resultados por debajo de lo esperado, esos resultados estarán determinados en su mayoría por una cantidad muy pequeña de manos. Estos períodos podrían prolongarse, generando una presión psicológica muy grande al jugador de póquer. Por tal razón no se puede ignorar, y debemos estar preparados para afrontarlas. De no ser así, el castigo podría llegar a ser la pérdida del presupuesto disponible para jugar al póker.


Qué cosas no debemos considerar respecto a las malas rachas.

Algo frecuente en jugadores de nivel inicial, es considerar que el resultado de una mano podría tener influencia en el resultado de la mano siguiente. Por ejemplo si yo busco un proyecto de color, que en el Flop tiene un 36 % aproximado de probabilidad de concretarse, y finalizada la mano no se completó, si en la mano siguiente tengo el mismo proyecto, la probabilidad seguirá siendo del 36 %. Es decir, no podemos considerar que nuestra probabilidad se incrementa por el hecho de no haber recibido nuestro proyecto en la mano anterior.

Considerando que una sesión es un conjunto de manos jugadas, y ampliando el concepto anterior, no se debe suponer que si tuvimos una sesión con un resultado por debajo de lo probabilísticamente esperado, la próxima mejorará por el hecho de que debería estar finalizando nuestra mala racha. Es decir, no debemos pensar que la mala racha tendrá una cierta duración, ni pensar que esto no podría extenderse más porque “ya ha transcurrido demasiado tiempo en que los resultados han estado por debajo de lo esperado”.

Con la misma idea, tampoco podemos considerar que si tuvimos una mala racha muy grande este año, no volverá a ocurrir por un cierto tiempo, dado que se trata de sucesos independientes, y no de eventos relacionados que tengan relación entre sí, o que ocurran con una cierta frecuencia.

Otro concepto erróneo, en el que se cae muchas veces por la necesidad psicológica de entender lo que está sucediendo, es intentar pensar que la mala racha no se pueda extender a un período de tiempo mayor al que uno supone que podría ser el límite, o a una cierta cantidad de manos, a una cantidad de BBs, o incluso a una cantidad de dinero perdido.

Algo que sí deberíamos tener en cuenta, es que si se produce una mala racha durante un período de tiempo mayor del que esperamos (o consideramos posible), es probable que existan otros factores más allá de la suerte que estén afectando a los resultados en forma negativa.

Pero sobre esto último vamos a hablar un poco más en la segunda parte de este artículo. Veremos además qué cosas no se debe hacer y qué cosas sí se debe hacer frente a una mala racha.

Les dejo un saludo.-


viernes, 8 de julio de 2011

Evaluando un All In en el Flop.


Hola gente! Les cuento que estos días estuve trabajando bastante sobre mi juego. En particular estoy analizando todas las situaciones en las que no llego al showdown, y termino perdiendo dinero por Foldear la mano. Mejorar esto es algo que normalmente no me resulta fácil, porque mi tendencia natural es a no jugar pozos muy grandes con cartas débiles. Además tampoco me parece muy sencillo por la gran agresividad que hay en NL400, lo que muchas veces te obliga a abandonar cartas que uno quisiera haber jugado.

Centré mis análisis fundamentalmente en las posiciones de robo (CO, Button y SB), en las Blinds, en todos aquellos pozos 3Beteados (ya sea por mí o por mis rivales), y en las manos que hago Fold en River y en menor medida en el Turn.

Los primeros días pude mejorar un poco los resultados, pero sólo durante los períodos de tiempo en los que me mantenía muy concentrado. El día de ayer fue el primero en el que pude tener mejoras durante toda la sesión. De todas formas mi idea es seguir analizando diariamente los resultados, al menos hasta conseguir que esto sea algo estándar y no algo generado por un esfuerzo de concentración especial.

La mano del día

En cuanto a la sesión de ayer, he seleccionado uno de los pozos más importantes del día. No es una mano difícil de jugar, pero me interesa como ejemplo para introducir el concepto de rangos y mostrar un ejemplo de uso de herramientas de análisis de probabilidades. Espero les guste.

PokerStars No-Limit Hold'em, $4.00 BB (9 handed) - PokerStars Converter Tool from FlopTurnRiver.com

MP2 ($179)
MP3 ($442.70)
CO ($400)
NachoAce (Button) ($400)
SB ($502.55)
BB ($502.95)
UTG ($660.70)
UTG+1 ($553.30)
MP1 ($400)

Preflop: NachoAce is Button with 5, Q
6 folds,  

La mano me llega foldeada hasta el botón, con lo que decido intentar un robo. El jugador de la SB tiene un 87 % de Fold al Steal, y el jugador de la BB un 68 %.

NachoAce bets $8, 1 fold, BB calls $4
Flop: ($18) 5, Q, J (2 players)
BB checks,  

He recibido un call desde la BB. El flop es realmente muy bueno, ya que recibo el segundo par doble de la mesa. Hago mi apuesta de continuación, intentando sacar el máximo valor de mis cartas.

NachoAce bets $12, BB raises to $36,

Recibo un Check Raise. Se trata de un jugador muy agresivo que ha ganado mucho dinero en NL400 y NL600. Tiene un 11 % de raise a la apuesta de continuación cuando no tiene posición, y un 44 % de Fold. Es decir, aunque es un valor importante ese 11 %, estimo que lo hace con cartas que tengan cierto valor.

Lo primero que pienso es si puede tener un Set. En este caso QQ o JJ lo veo poco probable, porque tiene un 17 % de 3Bet a los intentos de robos desde el botón, con lo que creo que hubiese resubido con esas cartas.

En cuanto a 55, no lo creo demasiado probable (aunque sí posible), ya que quedan sólo dos 5 en el resto del mazo, y probablemente también hubiese hecho un 3Bet preflop con esas cartas.

Por lo tanto, creo lo más probable que puede tener es un proyecto de color (dos diamantes), un proyecto de escalera (9-10 / K-10), o un par doble mejor que el mío (QJ).

Este jugador tiene además un 52 % de fold al Raise en el flop. Decido hacer un re-raise, y ver qué sucede.


NachoAce raises to $99, BB raises to $494.95 (All-In),


Recibo un All In de mi Rival. Volviendo a lo analizado antes, creo que sólo tengo un juego muy desfavorable contra un set (lo que considero poco probable), y contra QJ. El resto de los rangos de cartas tengo probabilidad favorable.

Si analizamos la mano con un software de evaluación de probabilidades (estoy utilizando Poker Stove), tenemos lo siguiente:

En primer lugar analizamos el rango que se considero más probable. Es decir cualquier par de cartas de diamantes.

                        equity              win                   tie              
Hand 0:            65.190%         65.19%           00.00%   { Qs5c }
Hand 1:            34.810%         34.81%           00.00%   (todas las combinaciones de cartas de diamantes)

Es decir tengo un 65 % aproximado de probabilidad de ganar la mano. Si agregamos un poco de dificultad, podemos incorporar QJ (una de las manos que nos tiene totalmente dominados). Calculamos entonces la probabilidad contra ese rango.

                        equity              win                   tie              
Hand 0:             61.373%         61.33%           00.05%  { Qs5c }
Hand 1:           38.627%         38.58%           00.05%  (QJ / todas las combinaciones de cartas de diamantes)

Es decir, seguimos teniendo probabilidad favorable. Agregando un poco más de pesimismo, voy a incorporar al rango posible de mi rival todos los Sets, y adicionalmente AQ (aunque al igual que con QQ y JJ creo que hubiese recibido un 3Bet preflop). Incluimos además K-10 y 10-9 para tener un rango completo.

                        equity              win                   tie              
Hand 0:            60.697%         60.64%           00.06%           { Qs5c }
Hand 1:           39.303%         39.25%           00.06%         (QJ / QQ / JJ / 55 / AQo / KTo / T9o todas las combinaciones de cartas de diamantes)

Es decir, seguimos teniendo probabilidades favorables contra los rangos estimados como posibles de mi rival. Por lo tanto el Call es claro.
 
NachoAce calls $293 (All-In)




Turn: ($802) 9 (2 players, 2 all-in)

River: ($802) 10 (2 players, 2 all-in)

Total pot: $802 | Rake: $3

Results:
NachoAce had 5, Q (two pair, Queens and fives).
BB had A, 7 (high card, Ace).
Outcome: NachoAce won $799


Creo que es un ejemplo de uso de este tipo de herramientas. He visto videos donde las utilizan mientras la sesión se encuentra en juego. En mi caso no me parece demasiado práctico cuando uno esta jugando muchas mesas, pero sí creo que es una importante herramienta para ir familiarizándose con la evaluación de probabilidades contra distintos rangos que estimamos tienen nuestros rivales.

En la estimación de rangos hecha, si somos un poco más rigurosos, deberíamos descartar todas aquellas combinaciones de manos de diamante que creemos que nuestro rival no hubiese pagado preflop. Por ejemplo 72s, 82s, 93s, etc. De todas formas con lo realizado podemos tener una aproximación bastante buena de las probabilidades que tienen nuestras cartas.

Les dejo un saludo.-

viernes, 24 de junio de 2011

Haciendo un Call horroroso.

Bueno, ante todo les cuento el por qué del título. En referencia a la entrada del 20 de junio (http://nachoace.blogspot.com/2011/06/seguimos-en-carrera.html), donde muestro una mano que comienza con un Call preflop con A5o en BB a un mini raise desde UTG, recibí un par de consultas acerca de ese Call preflop, y la calificación por parte de un lector anónimo que no quiso revelar su identidad de ser algo “horroroso”. Intercambié un par de mensajes con este lector, y con un par más de jugadores, y luego me puse a pensar algunas cosas que creí que podía valer la pena escribir.

Muchas veces uno lee algo en un blog, un libro o un foro, que le resulta convincente, y asume que es 100 % correcto. Luego puede suceder que en una situación distinta, en otro momento, ve algo que parece contradecirse con el concepto que habíamos tenido como correcto, y entonces asumimos que es erróneo, simplemente porque no coincide con la idea que teníamos como cierta.

Este no es el primer ejemplo que veo de afirmaciones que son dadas como “la única verdad” desde que leo información acerca del póker. Estas afirmaciones suelen presentarse como absolutistas, y en mi opinión, provienen en general de jugadores no demasiados exitosos en este juego. Cuando he leído a grandes jugadores, nunca veo que se expresen con tanta autoridad, sino que se expresan con más humildad al dar opiniones o conceptos del juego. Esto obviamente, a excepción de afirmaciones que pueden justificarse en forma matemática, donde podemos tener una certeza de los resultados, pero no es el caso de las situaciones de las que estoy hablando.

Algunos ejemplos que recuerdo son afirmaciones del tipo “nunca se debe apostar por información”, cuando sí creo cierto que uno puede apostar por valor, o para proteger su mano (o por lo que sea), y además porque esa apuesta nos puede brindar información que puede servir para el resto de la mano en juego. O afirmaciones tipo “nunca se debe hacer Call a un 3Bet”, cuando pienso que si existen situaciones donde es EV+ hacer Call, y además donde veo que muchos jugadores muy ganadores lo hacen todo el tiempo.

El problema de este tipo de afirmaciones, creo que radica en que son dadas como “total certeza”. Yo pienso que el Póker no es un juego de certezas, sino de probabilidades y estimaciones. Uno debe maximizar las probabilidades contra lo que uno estima que puede tener el rival (un rango de manos). Obviamente hay jugadores más hábiles que otros en hacer cálculos y estimaciones (que tienen que ver con la lectura de manos y necesariamente con la experiencia), pero creo que estas dos habilidades son fundamentales para un buen jugador de póker.

La mano en cuestión


Volviendo a mi call con A5o en BB, decidí mirar un poco mis datos, que sin llegar a ser una demostración de algo, sirven como un ejemplo práctico de una situación en particular. Lo que hice fue trabajar sobre mi base de datos desde enero de 2010, donde tengo 1.803.393 manos jugadas. La primera consulta que hice fue aquellas manos donde me encuentro en la BB, con A5o, y me llega la mano subida desde “early” o “Posiciones medias” (lo que implica que jugaré la mano post-flop sin posición), y yo haya hecho “Call” Preflop. Esta es la gráfica correspondiente:


Hay unas 100 manos incluidas en la muestra. Esto obviamente no es determinante, y además se encuentra influenciado por esta última mano (en la que gané).

Estos datos contienen el año 2010 y el 2011. Yo creo que he evolucionado como jugador en el 2011, con lo que suelo tener mejores resultados. Por ejemplo, la siguiente muestra es el total de manos en BB, con cartas entre (A2..A5) y (A2s..A5s), en las que hice Call a un Raise proveniente de “Early” o de “Posiciones Medias”:


Insisto en que no se trata de resultados definitivos, y que existe la posibilidad de que se encuentre influenciado por la varianza. Pero de todas formas, si pensamos que la gráfica del Fold en esas manos sería una línea recta descendiente a 45 grados (estamos hablando de manos donde ya puse la BB), es decir que en 286 manos hubiese perdido 286 BB, un resultado de cero ganancias nos habría hecho ganar esas 286 BB que tuvimos que poner obligatoriamente.

Con esto no pretendo decir que lo correcto es hacer “Call” a un mini-raise en posiciones tempranas con manos como A2..A5 sea correcto, sino que creo que uno debe ser más flexible a la hora de pensar y hablar (o escribir). Creo que hay situaciones donde estos Call pueden resultar rentables a largo plazo, y situaciones donde el Call es claramente una mala opción. Simplemente hay que tener la habilidad de decidir cuando deben hacerse.

Les dejo un saludo.-

miércoles, 6 de abril de 2011

Valor esperado de una apuesta.

Hola gente !

Hoy tuve una sesión difícil, donde estuve casi todo el día perdiendo (hasta casi el final !), y con el ALL IN EV en positivo. Para aquellos que no sepan de qué estoy hablando, les cuento:

EV: Expected Value (o valor esperado). Es el valor que se espera que tenga una apuesta. Es decir, si tengo 80 % de probabilidades de ganar, y el pozo tiene $ 100.-, mi EV es de $ 80.-

All IN EV: Es el valor esperado de las manos al momento que se fue all in. Es decir, que si en la misma mano de antes gano (y estamos all in), gané $ 20.- más que el ALL IN EV, y si pierdo, estoy $ 80.- bajo el ALL IN EV. ¿Se entiende?

Este valor sirve como indicador para saber si las apuestas que fueron all in fueron hechas en forma probabilísticamente correcta.

A largo plazo, la diferencia entre el ALL IN EV acumulado y el resultado real de las manos que fuimos all in, me indica si fui favorecido o perjudicado por la suerte (siempre hablando de las manos que se hizo all in, y evaluando las probabilidades en el momento en que esto se produjo).

Este año viene siendo bastante difícil, porque el ALL IN EV esta muy por encima de los resultados reales.

Volviendo al día de hoy, sobre el final del día conseguí que mis resultados estén en positivo (muy poquito, pero positivo al fin). El All IN EV estuvo unos $ 500.- por encima de los resultados.

Por último, les dejo el Bad Beat del día. Es algo que no se ve muy seguido (por suerte !!!)




En el momento en que se produce el ALL IN, mi rival tiene 1 sola carta que le da la victoria (con el A restante yo hacía color y ganaba la mano). Esto me da una probabilidad de un 97,7 % de ganar la mano.

Es decir, que mi ALL IN EV en esta mano es de $ 314.- x 97.7 % = $ 306,77
Por su parte, el EV de mi rival es de $  7,23

El resultado real para mi fue $ 0.-. 
¿Alguien me dice a quién le cobro los $ 306,77? Bueno, es póquer.. Estas cosas pasan.

Espero se haya entendido, y les haya gustado.
Aguardo comentarios.

Saludos !